No es la primera vez que surgen mensajes alarmistas diciendo que pronto tendrás que pagar por tener una cuenta en las redes sociales y la verdad nunca ha sucedido. Sin embargo, desde hace algún tiempo el modelo de generación de ingresos de las plataformas está cambiando y puede que no estemos tan lejos de tener que pagar por uno o más servicios.
La completa gratuidad de las redes sociales ya dejó de ser una realidad. Es cierto que desde hace mucho las marcas invierten en publicidad, creación de contenido, diseño, copywriting y más. Por lo que tener una presencia en estas plataformas nunca ha estado libre de costes. Pero algunos servicios que se incluían dentro de la experiencia “gratis” están cambiando a un formato de suscripción.
¿Quieres saber qué es lo que está sucediendo y cómo puede afectar a tu marca? Lee completa la siguiente reflexión.
¿Cómo generan dinero las redes sociales?
Ya debes saber que Facebook, Instagram, TikTok, YouTube y las demás generan dinero con el usuario, eso incluye las cuentas personales y las empresariales. La publicidad es la principal fuente de ingresos. Las marcas necesitan ganar visibilidad y para ello pagan ads que van a su público objetivo. Este ha sido el modelo que muchas plataformas han mantenido por varios años.
No obstante, las cosas parecen estar cambiando y los servicios que antes eran gratis, ahora no lo son o pronto dejarán de serlo. Las redes sociales están virando a premium o, quizás, freemium. Esto significa que los usuarios que paguen tendrán una experiencia muy distinta a quienes no lo hagan.
Desde que aparecieron las redes sociales a todos los registrados se les ofrecen servicios gratis. Por ejemplo, creación de cuenta, publicación de contenido, la posibilidad de crear un espacio para comunicar, alcanzar a otras personas y establecer presencia. Esto a cambio de datos y la posibilidad de segmentarlos para publicidad (Y también para venderlos a terceros, pero eso es tema para otro blog).
Bajo la promesa de “conectar con la audiencia que más te interesa”, las redes mostraban más beneficios gratis para las marcas: mientras que la publicidad seguía siendo un opcional para generar más exposición de marca, tráfico y ventas directas. Y es gracias a esto que numerosas empresas se han consolidado, han surgido los creadores de contenido y toda una cultura de consumo se ha instaurado en la sociedad.
¿Es posible que esto cambie?
Sí, y la verdad es que ya está sucediendo. Una de las primeras redes en dar un cambio al modelo premium ha sido Twitter con la llamada insignia de Twitter Blue. Elonk Musk decidió ofrecer la verificación de cuentas a cambio de una suscripción, la que además da beneficios de un poco más de alcance, tuits y videos más largos. Esto por 7 euros al mes. Ya queda de tu parte decidir si vale la pena o no pagar.
Detrás de Twitter se unió Snapchat y ahora Meta Verified. Este nuevo plan de servicios pagos adicionales para los usuarios no se presenta sin algunos problemas. El primero es el equilibrio entre valor de la oferta y el precio.
Las plataformas sociales tienen que comprobar que vale la pena la inversión, sin que el usuario que elija la gratuidad sienta frustración por no poder lograr sus servicios, a menos que se pase al modelo pago. Por otro lado, está la importancia de mantener la pertinencia de la oferta paga. De momento, se está probando con la verificación y la novedad trae muchos suscriptores, pero poco a poco es probable que este servicio pierda atractivo.
La insignia en principio servía para demostrar la credibilidad y autenticidad de determinada cuenta, pero ahora que se puede obtener por una mensualidad, esos valores pierden importancia entre los usuarios.
Por ende, dejarán de pagar por ello. Twitter es la empresa que más se está arriesgando con estas prácticas, pues poco a poco está afectando la experiencia de quienes no pagan dentro de la plataforma. Otro ejemplo de ello es la eliminación de la identificación de dos pasos con SMS gratis.
Otra red que presiona demasiado a los usuarios y, a veces de un modo casi descarado, es YouTube. La plataforma bombardea con publicidad a quienes no pagan la versión premium.
Un cansancio en el modelo 2.0
Desde hace un tiempo se habla de un agotamiento en el modelo de negocio que han implementado las redes sociales. Aunque los anuncios siguen siendo una herramienta valiosa para el crecimiento escalable de las marcas, las empresas también invierten en otras alternativas de marketing. Por ende, las plataformas han reportado menos ingresos por parte de los anunciantes.
Además, hay que sumar que la Unión Europea está aplicando normas para dar más protección a los usuarios y sus datos, impidiendo la recolección de información sin la previa autorización de las personas. La App Tracking Transparency de Apple no le permite a Facebook e Instagram tener perfiles tan completos de usuarios de iPhone.
Todo esto demuestra que el intercambio de gratuidad por datos no va a ser tan rentable y, poco a poco, las plataformas van a idear nuevas formas de obtener dinero de sus usuarios. ¿Qué puede hacer tu marca al respecto? Te damos algunas recomendaciones:
- Tener una estrategia de marketing digital omnicanal.
- Aprovechar otros medios para conectar con tus usuarios.
- Enfocarte en distribuir contenido de valor.
- Hacer inversiones inteligentes en anuncios.
Esto último es muy importante. Las campañas de ads pueden traerte retornos muy buenos cuando son ejecutadas bajo conocimiento experto, de lo contrario corres el peligro de despilfarrar tus recursos y conseguir anuncios baneados y cuentas bloqueadas.
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